Si te gustan tanto las rosquillas como a Homer Simpson y quieres sentirte por un día como uno de tus dulces favoritos lo tuyo es el disfraz de Donut. Ya sea casero ya sea un elaborado y realista traje comprado, ya sea de fresa o glaseado clásico, serás el más sabrosón de toda la fiesta y no habrá quien se resista a hincarte el diente.
Sin complejos, divertido y con o sin tropezones de chocolate, toda una tentación que harás relamerse de envidia al resto de los invitados. Pon a prueba tu imaginación y elabora tu rosquilla favorita para llevártela puesta, nunca mejor dicho.
Mi pastelito de cumpleaños.
No sabemos a quién habrá querido sorprender la joven de la foto, pero no hay duda de que lo habrá hecho con su original y divertido traje. Convertirte en una tarta de varios pisos puede ser muy sencillo con la ayuda de varias cajas redondas de diferentes tamaños. O tan sólo un armazón de alambre que puedes ir colocando en tu cuerpo haciendo círculos, desde el más pequeño en el cuello hasta uno más grande a la altura de los pies, cubiertos por una tela blanca que simule el merengue. Sobre ella se pueden colocar diferentes adornos para dar más realismo. Por ejemplo fresones de cartón, pepitas de chocolate de cartulina, o velas de colores de goma eva.
En el caso de la foto es aun más sencillo que todo eso ya que se ha rellenado un traje un par de tallas más grandes de lo que correspondería a la niña con unos pedazos de cartón y se ha decorado con unas flores de tela y un gorro divertido. Más sencillo imposible, la verdad. ¿Se te ha ocurrido reciclar el vestido de comunión de la mayor para hacer el disfraz de la pequeña? ¿O utilizar un anticuado vestido de una boda que estás deseando olvidar?
Que ricos sugus
Y para acabar con la lista de disfraces dulces, unos sabrosos sugus. ¿Quién no ha disfrutado de estos deliciosos caramelos con su característico envoltorio? Pues unas medias gruesas negras, un jersey del mismo tono y una caja de cartulina hueca con sitio para la cabeza y el cuerpo y unida por dos tiras en los hombros. Puedes dibujarla para ser la viva imagen de los caramelitos más blandos.
Quizás por fin podáis responder a esa trascendental duda que ha torturado al ser humano durante generaciones ¿por qué los sugus de piña son azules?