En nuestros tiempos la organización de fiestas temáticas se ha convertido en una actividad casi cotidiana.. Por nuestros días, ya casi es extraño que un festejo sea simplemente una reunión de personas, y esto se debe al extra de diversión que sólo las fiestas temáticas pueden aportar.
Como en cualquier otro evento, primero definiremos el tipo de evento. Supongamos que cumplimos años, y decidimos festejarlos con una fiesta temática bien orientada. Podría tratarse de nuestra película favorita, de una época histórica, de un color, de un elemento, de lo que queramos. En nuestro ejemplo, digamos que el festejo será tematizado según un período greco-romano. Nuestro evento tendrá no más de 20 invitados, así que definimos como ubicación nuestro hogar.
Diseñamos las tarjetas de invitación con suficiente tiempo como para advertir a nuestros invitados, para que puedan prever su atuendo para la ocasión. Recordar que las tarjetas también son parte del evento, por lo cual deben estar bien orientadas, mediante diseños, dibujos y tipografías, hacia esta época que queremos emular. Recordar también que tú tienes que definir tu atuendo, ya que por ser el anfitrión vas a ser el referente máximo del evento. En nuestro ejemplo: infaltable una toga, sandalias, y un aplique metálico en el pelo a forma de corona de laureles.
Internet es una gran fuente de información que nos permite indagar sobre los alimentos y bebidas. En este caso, podemos exhibir bandejas metálicas con uvas -y otras frutas-, vino tinto, quizás algunas carnes. Definir bien la vajilla, ya que si el evento lo permite, podría tratarse de vajilla descartable tematizada, que podeis adquirir en muchos negocios y tiendas. En nuestro caso, vamos a tener que comprar muchas copas metálicas o de vidrio, y buena vajilla.
La decoración también debe complementar al tema. Si el evento es en tu hogar, despeja la habitación y coloca elementos ambientadores tematizados. En nuestro ejemplo, nada mejor que mesas bajas y muchos cojines para que tus invitados se posen encima, en reflejo de la época que elegiste.
Recordar que todos los elementos deberían reflejar el tema, ya sea en colores, formas y materiales. Y procura tener a mano todo lo que pienses que pueda ser de utilidad… la cámara digital no será reflejo fiel de la época, pero seguro vas a querer conservar recuerdos de este evento tan bien organizado que preparaste y con el cual cumples un nuevo aniversario.
Feliz creación.
Erika.