El disfraz de pirata es un clásico, pero nunca pasa de moda y desde que apareció la película “Piratas del Caribe” se renovó el interés por este tema tan atractivo de los bandidos del mar.
Este disfraz sirve para cualquier persona, niños, adultos, hombre y mujeres y además tiene la ventaja de que es fácil de armar, si se quiere hacer casero.
Se necesita unos pantalones; si son viejos mejor porque se pueden desflecar en los bajos o de lo contrario habrá que remangarlos pero en forma desprolija, para que den aspecto de viejos.
También se necesita una camisa. Si se puede conseguir una con mangas importantes, va a dar la nota, pero en caso contrario sirve cualquiera.
El chaleco es infaltable, de cualquier material. En caso de no tenerlo, se le pueden sacar las mangas, el cuello y los botones a una camisa vieja y queda perfectamente adaptada, para funcionar como chaleco para el disfraz.
Se le pueden agregar diversos accesorios, como pueden ser cadenas de oro u otras joyas, pero lo que no debe faltar, de ninguna manera es el parche en el ojo, muy fácil de hacer con una tela negra y un elástico para poderlo sujetar por detrás de la cabeza y también es importante contar con una espada o arma similar que puede ser de juguete o fabricada para esos efectos.
Otro accesorio fundamental es el pañuelo en la cabeza, que debe ser en un color resaltante, como por ejemplo el rojo. En lugar de pañuelo se puede usar un sombrero de pirata, pero es más complejo de armar.
Se puede poner, también, cinturones armados con trapos, que darán una imagen de descuido muy conveniente.
Para complementar el atuendo se pueden usar un par de botas, de cualquier tipo, que servirán para este disfraz. Si se le quiere muy completo, se puede agregar un buen maquillaje: una barba perita y unos bigotes grandotes pueden ser ideales, ya sea un hombre o una mujer quien lo lleve.
Dentro de este disfraz básico, se admiten otras variantes, de acuerdo a la ocasión.
Es lindo, divertido y fácil de hacer. A trabajar y que nos quede lindo.